Demasiado enamorada es el nuevo título de Abbi Glines que Ediciones Kiwi nos trae en español. Y de igual manera, es también el inicio a una nueva serie: Rosemary Beach, siendo los tres primeros libros protagonizados por la misma pareja, Rush y Blaire (hay un cuarto libro que nos muestra el punto de vista de la historia del protagonista masculino). Hace años leí unos libros de la autora y no me entusiasmaron demasiado, sin embargo a esta otra serie suya sí que le tenía verdaderas ganas. Así que al saber que la publicaría Kiwi, me dije de leerla en inglés, y resulta que me he zampado los tres primeros libros con patatas fritas sin pestañear casi. Eso sí, aunque no ha resultado ser una maravilla por motivos que comentaré a continuación, su lectura me ha durado un suspiro; me ha parecido muy fresca y en general, me ha dejado un sabor de boca bastante positivo.
Rush y Blaire coinciden un día cuando a ésta no le queda otra opción en la vida que acudir al amparo de su progenitor, quien la abandonó a ella y a su madre tras una desgracia acontecida. Pero con la muerte de su madre, Blaire decide que a pesar de todo, sigue siendo su padre y tiene, por decirlo de alguna manera, la obligación de cuidar de ella. Así que llega a la mansión de éste, donde vive con su nueva familia, totalmente desesperada con la intención de pedirle ayuda y al menos un techo donde vivir hasta que encuentre trabajo y se estabilice. Pero en ese lujoso lugar no se encuentra con él, sino con una fiesta llena de alcohol, jóvenes ansiosos y Rush, su hermanastro, quien no le pondrá las cosas nada fáciles.
Se trata de una historia con los ingredientes necesarios para enganchar al lector que le guste este tipo de libros; mucha tensión entre los protagonistas, miradas arrebatadoras, pasión, drama, intensidad, malentendidos, un amor imposible, ella pobre, con pocas posibilidades, él rico, que lo tiene todo… Una premisa que me hubiese fascinado, de principio a fin, si la hubiese leído hace 5 o 6 años atrás, cuando mi experiencia en historias de este tipo era bastante básica o incluso nula. Ahora, en ocasiones, parece que me sorprenden pocos argumentos debido a que tengo la sensación de haberlo leído todo, aunque claramente no es el caso. Como veis, es una apreciación personal, puramente mía. La realidad es que Rush y Blaire me han gustado mucho y tienen una historia de amor bonita pero poco novedosa a estas alturas.
Definitivamente, Demasiado enamorada es una lectura trepidante, dulce, intensa, muy fresca, con la que pasar unos ratos fantásticos enganchada a sus páginas. Su final es de infarto y nos deja deseando leer su continuación por el bien de nuestra salud mental. No deja de ser la típica historia de adolescentes escrita para adolescentes, pero puede que por eso guste tanto y tenga tanta buena crítica.