La portada y la sinopsis fueron los detalles sugerentes que llamaron mi atención de Ni tú Romeo, ni yo Julieta de Sylvia Marx. Le quise dar una oportunidad a la autora, desconocida para mí bajo ese seudónimo, no tanto si hablamos en cambio de Sylvia Martín, a quien sí puedo reconocer al menos por vía redes sociales. Esencia, uno de los sellos románticos de Planeta, como sabréis, lleva apostando un tiempo por escritoras españolas que se autopublican o se han autopublicado alguna vez, y lo cierto es que personalmente no he tenido buena experiencia con alguna de estas obras. La calidad para mi gusto ha sido baja o demasiado baja si la comparo con lo que publicaba antes el sello, de ahí mi reticencia, y aún sigo deseando ver títulos de histórica como antaño la editorial publicaba. Sin embargo he querido refrenarme un poco, y tener la mente más abierta y dar oportunidades. Hasta ahora no me había vuelto a atrever con una de estas historias de autoras españolas publicadas por Esencia. Me he re-estrenado con Sylvia Marx, y el resultado ha sido, con cosillas negativas, satisfactorio. Más bueno de lo que esperaba. La lectura de Ni tú Romeo, ni yo Julieta ha sido muy fresca, pícara y ligera, divertida, con algunos giros inesperados.
La sinopsis misma nos introduce perfectamente en la trama, es así de chispeante e interesante la cosa. Julia acaba de pillar in fraganti a su novio acostado con su mejor amiga. Sale despavorida con el coche de su ya-momentáneamente-ex-novio y en el intento se lleva por delante a un motero. Pero no cualquier motero. Este en concreto se dice llamar Xabi, tan sexy y guapo como él solo, y guarda algún que otro secreto. ¿Qué será? ¿Qué pasará entre Julia y Xabi? Tanto el uno como el otro tienen mucho que descubrir y revelar. Son dos personas con mucha chispa y química entre ellos. Eso se nota desde el primer momento en que se ven, en dicho accidente donde Xabi es atropellado por Julia (¿desgracia o pura suerte?). La química es palpable, sin embargo algo que me gustado es que no ha sido un directo "aquí te pillo, aquí te mato" referente a las escenas subiditas de tono. Sino que estas se han tomado su tiempo para aparecer de forma natural. Eso ha sido para mí un punto muy positivo, ya que era una de las cosas que más temía, que todo fuera sexo de pegote, de puro relleno y sin sentido. Julia ha sido un personaje que me ha sorprendido gratamente, con su carácter rebelde, tan vivaracha y con una lengua viperina de cuidado. No se deja intimidar por nada, es fuerte y decidida, y me ha encantado su personaje. Xabi, por su parte, también me ha gustado. Creemos que no oculta nada hasta que nos damos cuenta de que sí. Menudos bombazos inesperados de esos que dejan con la boca abierta nos esperan con estos dos juntos. Una pareja explosiva.
Ni tú Romeo, ni yo Julieta es toda una aventura, divertida y llena de acción, con la que he echado unos ratos amenos. No puedo pedir más. Ha superado mis expectativas, y por ello estoy contenta. Sin embargo, tengo varios peros importantes. El pero principal que me ha fastidiado en parte mi buen sabor de boca que tenía llegando a los último capítulos, ha sido el final. Sí, el final propiamente dicho. Me ha sabido muy corto, demasiado escueto y sobrio. Vamos, que prácticamente me ha dejado con la miel en la boca. Según mi forma de ver, la autora debería haberlo desarrollado más; haberse explayado más en un bonito epílogo. Creo que Julia y Xabi se lo merecían. Por otro lado, peros de apreciación puramente personal y sin ánimo de ofender, más bien al contrario, ha sido la forma de escribir de Sylvia Marx. No me ha disgustado enteramente, pero su elección de palabras, su forma de narrar, quizá ha sido demasiado sencilla, muy de la calle, para mi gusto. No las he tenido todas conmigo al respecto, pero lo importante es que en general he acabado contenta y me lo he pasado bien en los pocos días que me ha durado su lectura.
Para terminar diré que Ni tú Romeo, ni yo Julieta ha sido una lectura agradable, sin pretensiones, entretenida, que engancha y atrapa al lector sin lugar a dudas. Una historia diferente en parte a lo que Esencia nos tiene acostumbrados, un romance con un toque macarra, sexy, con su dosis de acción y acontecimientos inesperados.
La sinopsis misma nos introduce perfectamente en la trama, es así de chispeante e interesante la cosa. Julia acaba de pillar in fraganti a su novio acostado con su mejor amiga. Sale despavorida con el coche de su ya-momentáneamente-ex-novio y en el intento se lleva por delante a un motero. Pero no cualquier motero. Este en concreto se dice llamar Xabi, tan sexy y guapo como él solo, y guarda algún que otro secreto. ¿Qué será? ¿Qué pasará entre Julia y Xabi? Tanto el uno como el otro tienen mucho que descubrir y revelar. Son dos personas con mucha chispa y química entre ellos. Eso se nota desde el primer momento en que se ven, en dicho accidente donde Xabi es atropellado por Julia (¿desgracia o pura suerte?). La química es palpable, sin embargo algo que me gustado es que no ha sido un directo "aquí te pillo, aquí te mato" referente a las escenas subiditas de tono. Sino que estas se han tomado su tiempo para aparecer de forma natural. Eso ha sido para mí un punto muy positivo, ya que era una de las cosas que más temía, que todo fuera sexo de pegote, de puro relleno y sin sentido. Julia ha sido un personaje que me ha sorprendido gratamente, con su carácter rebelde, tan vivaracha y con una lengua viperina de cuidado. No se deja intimidar por nada, es fuerte y decidida, y me ha encantado su personaje. Xabi, por su parte, también me ha gustado. Creemos que no oculta nada hasta que nos damos cuenta de que sí. Menudos bombazos inesperados de esos que dejan con la boca abierta nos esperan con estos dos juntos. Una pareja explosiva.
Ni tú Romeo, ni yo Julieta es toda una aventura, divertida y llena de acción, con la que he echado unos ratos amenos. No puedo pedir más. Ha superado mis expectativas, y por ello estoy contenta. Sin embargo, tengo varios peros importantes. El pero principal que me ha fastidiado en parte mi buen sabor de boca que tenía llegando a los último capítulos, ha sido el final. Sí, el final propiamente dicho. Me ha sabido muy corto, demasiado escueto y sobrio. Vamos, que prácticamente me ha dejado con la miel en la boca. Según mi forma de ver, la autora debería haberlo desarrollado más; haberse explayado más en un bonito epílogo. Creo que Julia y Xabi se lo merecían. Por otro lado, peros de apreciación puramente personal y sin ánimo de ofender, más bien al contrario, ha sido la forma de escribir de Sylvia Marx. No me ha disgustado enteramente, pero su elección de palabras, su forma de narrar, quizá ha sido demasiado sencilla, muy de la calle, para mi gusto. No las he tenido todas conmigo al respecto, pero lo importante es que en general he acabado contenta y me lo he pasado bien en los pocos días que me ha durado su lectura.
Para terminar diré que Ni tú Romeo, ni yo Julieta ha sido una lectura agradable, sin pretensiones, entretenida, que engancha y atrapa al lector sin lugar a dudas. Una historia diferente en parte a lo que Esencia nos tiene acostumbrados, un romance con un toque macarra, sexy, con su dosis de acción y acontecimientos inesperados.
ROMANCE CONTEMPORÁNEO / AUTOCONCLUSIVO / ESENCIA (PLANETA)